El arte de cosechar el sol

¿Por qué sembrar con árboles? o, ¿por qué no sembrar con árboles?. ¿Será que los árboles dan demasiada sombra?. ¿Será que compiten con las hortalizas o con los granos de manera que les quitan minerales y nutrientes? ¿Tal vez se vuelve más difícil el manejo de los cultivos?.

En agricultura se le tiene miedo al árbol. Es raro ver huertos o parcelas agroforestales. En arca tierra este tipo de agricultura es nuestra favorita. La Sintropía no otra cosa que sintonizar y aprovechar los procesos naturales. Primero tenemos al sol. La luz solar es la energía que permite el crecimiento de todas las plantas. Además es gratis y continua. ¿Cómo podemos hacer para captar las mayor cantidad de luz solar de manera que podamos producir más plantas? Hay un proverbio chino que dice: la agricultura es el arte de cosechar el sol. Si tomamos como modelo un ecosistema maduro como un bosque, lo primero en lo que pensamos es en árboles. En realidad hay toda una serie de estratos de plantas que crecen en un bosque. 

La agroforestería toma el bosque como modelo con la diferencia de que encaminamos el diseño hacia la producción de alimentos para el ser humano. Tenemos así, un sistema productivo que: retiene el suelo evitando la erosión, infiltra agua, captura enormes cantidades de carbono, atrae biodiversidad y, por sí fuera poco, produce alimentos. 

No todos los cultivos necesitan plena exposición al sol. Algunos gustan de mucha o de poca sombra. Pensemos en los terribles calores que con cada vez más frecuencia sentimos. Las plantas también los sienten. Un poco de sombra es muy agradecida. 

Aprovechar lo más posible el sol, posibilita el crecimiento de las plantas y árboles. No todas son para alimento nuestro. Usamos muchos árboles para poder podarlos. Las podas generan materia orgánica que, además de aportar minerales que vienen de muy profundo en el suelo, de las raíces de los arboles, nos dan hojas y madera que cómo en los bosques, nos sirven para alimentar la vida en el suelo. ¿Alguna vez han escarbado con sus manos el suelo de un bosque? Sentimos la humedad, olemos los hongos y tocamos billones de microorganismos. 

La agroforestería es un conocimiento ancestral que se está recuperando y enriqueciendo con prácticas nuevas. Es una forma de potencializar los procesos de vida. El ser humano ayudando a llevar a la naturaleza a su mayor expresión. Es una práctica bellísima que nos reconecta con el dinamismo de la vida, ayuda a enfriar el planeta y nos da alimento súper nutritivo. 

Si la mayor parte de la tierra usada para producir alimentos se cultivara a modo agroforestal, seguramente tendríamos que cambiar nuestra dieta y adaptarnos más a lo local y temporal, pero también se revertiría el calentamiento global. 

Namastê Messerschmidt en el curso de Agricultura Sintrópica